domingo, 27 de mayo de 2012

Los votos del PLD

Las tendencias electorales para fines de resultados es importante observarlas. Para confirmarlo solo hay ver cómo Danilo Medina crecía de manera consistente y cómo se daba el fenómeno contrario en la candidatura de Hipólito Mejía. Eso hace  que en este breve ensayo yo le eche una miradita a los números del PLD en las últimas tres elecciones presidenciales.

El PLD como institución consolidó su militancia a raíz de la apertura que se dio cuando se les concedió la categoría de miembros a un millón de simpatizantes, luego de las elecciones del 2000, en el VI Congreso Prof. Juan Bosch. Hasta ese momento  el PLD era un partido de cuadros con una matrícula que rondaba los 32 mil miembros y las decisiones se tomaban por mayoría orgánica. En las elecciones congresuales  y municipales del 2002 el partido morado estaba estrenando su nuevo rol como organización masificada, obteniendo como resultado un senador, José Tomás Pérez, en el Distrito Nacional.
En las elecciones del 2004, el PLD obtuvo el 49% de los votos, récord en los procesos electorales bajo el sistema de doble vuelta en RD. Leonel resulto ganador de esas elecciones con un 57%, producto de un 8% aportado por las fuerzas aliadas al PLD.

En las elecciones del 2008, el PLD obtuvo un 45% de los votos, como parte de una alianza que culminó con una victoria de Leonel en primera vuelta con un 53.83%.

Como se sabe en el proceso recién finalizado del 20 de mayo, la organización fundada por Bosch triunfó con un 51.2 %, alcanzando  de manera particular un 38%.
¿Qué hay de diferencia entre los dos procesos anteriores y este último?¿Está en declive el PLD?
 Esas  preguntas serán respondidas con mi humilde interpretación de esos resultados, como una forma de iniciar el debate.

Danilo, hoy Presidente electo, fue un formidable candidato, pero él es el primero en reconocer que Leonel es el líder del partido y del país y un líder atrae hacia sí  una gran cantidad de fuerzas y atracciones propias de su magnetismo y comunicación con las masas, más allá de las estructuras partidarias. Esos afectos no son voluntades almacenadas en un lugar que se pueden traspasar o transferir en su totalidad, de forma automática, a otro candidato.

El ejercicio del poder atrae voluntades y  gratitudes, adhesiones y rechazos. Después de un ejercicio de 8 años aquellos segmentos de la población  que no sienten los beneficios directos del gobierno, aspiran a que el panorama cambie en su beneficio y depositan su esperanza en la opción con más posibilidad,  que sea diferente a los que ostentan la posición. El cambio es su única esperanza de ser parte de los nuevos incumbentes del gobierno.

Otro  elemento que hay que tener en cuenta  es el manejo de las alianzas y los movimientos de apoyo. Trece organizaciones políticas conformaron el denominado Bloque Progresista junto al partido oficial. En el caso de Elías Piña, esas organizaciones actuaron de forma desarticuladas. Su única coincidencia era en las actividades de masa. Eso explica que no se definiera una estrategia de captación de electores de la oposición y se produjo una especie de reciclaje, retorno y préstamos de adeptos. El caso más evidente es el de los movimientos de apoyo que estaban orientados a reclutar a ciudadanos/as que no estaban matriculados en ninguna organización política. Se supone que los nuevos adeptos captados votarían a través del PLD como plataforma y soporte institucional de la candidatura de Medina, pero el 38 % obtenido por la organización morada de forma individual  indica  que el boom de los movimientos de apoyo no aportó al PLD los votos que de ellos se esperaban.

Por último me quiero referir a la institución , el PLD. En el proceso electoral pasado  no hubo una ofensiva para vender al partido. La publicidad alusiva al voto por el PLD fue menor a la de campañas anteriores. La dirección política estática fue cuestionada por el 30% de la membresía en el plebiscito pasado. La pérdida de once puntos en los dos últimos  procesos electorales  es el resultado de la combinación de los factores analizados y otros no menos importantes. De todas formas la organización  de Bosch sigue siendo una fuerza dominante y aglutinante. En los días por venir el partido oficial tendrá que evaluar  su participación en el proceso recién concluido y abocarse a realizar los cambios necesarios para continuar por la senda del progreso y el desarrollo que evidencian sus gestiones. La oposición luce desconcertada y dividida, por lo que su futuro y expectativa de éxito parece incierto. El panorama  se les oscurece más cada vez que surge la idea de que a quién enfrentarán en el próximo  certamen electoral  es al hoy presidente de la República, Dr. Leonel Fernández Reyna. Imagínense una publicidad que diga más o menos así : LEONEL 4X4= 16.

jueves, 24 de mayo de 2012

Gracias


La palabra gracias fue escogida como título de este escrito porque es una  de las palabras más hermosas  del Castellano. La elijo porque quiero decir gracias  por razones varias:
La primera es a mi familia, a los que me apoyaron y a los que no me apoyaron en este proceso electoral.
La segunda expresión de gratitud es para los miembros de otros partidos opositores, sobre todo  a los del PRD, porque sus comunicadores y dirigentes  fueron muy respetuosos conmigo durante esta campaña electoral. Hice opinión pública en contra  de sus aspiraciones legítimas de obtener la victoria y si me excedí en algún comentario  me disculpo. Mi reconocimiento a ellos porque en una jornada con diferencias marcadas , propio de las peculiaridades  de la política en la RD, recibieron un gran respaldo del pueblo dominicano. Ahora hay que continuar  el fortalecimiento  de la democracia dominicana  con el involucramiento de los mejores hombres y mujeres  en la marcha del Estado.
En fin, gracias a todos los que con su trabajo y comportamiento adecentaron la actividad política. Estoy orgulloso de haber dado mi humilde apoyo a Danilo y Margarita porque pienso que ellos son la expresión de lo mejor de la clase política dominicana. Espero que su ejercicio en el poder  no lastime la esperanza de todos los que creemos que ellos nos representarán con dignidad.
Este certamen electoral me permitió conocer a mucha gente con calidad humana y profesional. Una de ellas me escribió un mensaje impresionante por ser una persona en plena formación, en el que me decía: " no lo apoyé porque su candidato no era mi candidato y no me puedo engañar a mí misma ni puedo engañarlo a usted diciéndole que voté por él". Parece que me he ganado el derecho de que la gente sea sincera y transparente conmigo porque una actitud similar la recibí en las congresuales  del 2006 cuando uno de mis profesores preferidos porque contribuyo en la formación de mi carácter, rechazó una colaboración económica que le enviaron conmigo para la campaña de ese entonces. Gracias por su dignidad y entereza. El país necesita 10 millones de personas así. Gracias.