viernes, 31 de enero de 2020

Bánica: hoy me acordé de ti.


Bánica es un topónimo  de origen indígena proveniente de la palabra Banique que significaba "tierra de ébanos", fundada por el Adelantado Diego de Velásquez en 1504, en la ribera izquierda del Río Artibonito. Fue población importante en sus principios, pero decayó después considerablemente. A finales del siglo XVIII fue poblada con inmigrantes de las Islas Canarias, trasladándose el pueblo al lugar actual, un poco alejado del río. Abandonada en los comienzos del siglo XIX, se vio restablecida durante los años de la dominación haitiana (1822-1844) como parte del Departamento de Artibonito. Hoy día tiene una población que ronda los 6 800 habitantes, distribuida en los distritos municipales de Sabana Cruz, Sabana Higüero y Bánica urbana,  a la que se le  suma la población de sectores urbano marginal en comunidades como La Recta, El Cerro y de otras de la zona rural, entre ellas Las Cañitas y Rincón Grande.
En mi opinión Bánica es el municipio de mayor riqueza cultural que tiene la provincia Elías Piña, pero esa fortaleza no se refleja en su economía y desarrollo, la que sigue basada en el intercambio comercial con Haití que genera algunos empleos privados, la agricultura, la crianza de animales, el empleo público y la jornada agrícola por paga o "jornaleo".
Conocí a Bánica en el 1994 en mi ruta hacia la clínica de Pedro Santana en mi rol de Extensionista de CARE en el Proyecto Materno Infantil (PROMI), que ejecutaba en coordinación con la Secretaria de Estado de Salud Pública y Asistencia Social. En ese proyecto me convertí en el promotor de los atractivos de Bánica con mis compañeros de trabajo y para las patronales del 1995 vino una excursión de CARE regional y nacional; los llevé a la iglesia colonial, construida probablemente a finales del siglo XVII y principios del XVIII. Desde la iglesia pasamos al reloj del sol en el parque, al lado de esta y, desde allí,  nos trasladamos al paso fronterizo”de Nonón” para ver a los haitianos y dominicanos cruzar el Artibonito en canoa, como lo hacían los antiguos pobladores de esa localidad. De inmediato nos trasladamos al Cerro de San Francisco en donde el día 4 de octubre de cada año se celebra la fiesta del “Cerro de San Francisco”, tercera fiesta nacional más importante después de  la j Virgen de las Mercedes en la Vega  y la Virgen de la Altagracia en Higüey. Ahí me divertí mirando a Adela, Olga  y otras compañeras majando rocas para extraer polvo y embarrarse el órgano al que ellas aspiraban el santo le diera suerte, vi caras llenas de polvo y no describo más para no limitar su imaginación.
Ese primer contacto  que tuve en el 1994  y el de cualquiera que  visite a Bánica  es una invitación al regreso a ese lugar. Y yo volví. En el 2001 concursé para un empleo en el Proyecto para Pequeños Productores del Suroeste (PROPESUR), ejecutado por el gobierno dominicano con financiamiento del  Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA) y obtuve el puesto para coordinar una Agencia de Promoción de Área (APA 6) para los municipios de Pedro Santana y Bánica. Ahí conocí la "rosa de Bánica", una hermosa flor que solo habita en el Cerro de San Francisco.
La APA 6 en su paso por Bánica y Pedro Santana amplió y reconstruyó 8 escuelas, construyó 1 acueducto, 1 clínica, hizo la intermediación para la unidad móvil de la COOPCENTRAL para que los productores y micro empresarios accedan a préstamos para proyectos productivos a través de un acuerdo entre esa institución financiera y el PROPESUR.
En el periodo del 2001 al 2005 se inició el acompañamiento de unas 30 organizaciones comunitarias de base (OCB) para que estas adquieran su reconocimiento  legal y fortalecer la  capacidad técnica  de éstas para acceder al crédito corporativo y para que  tengan mejor acceso a los servicios básicos, sobresale la lucha de unas 20 organizaciones de  Sabana Mula por energía eléctrica y las de Higuerito por una Unidad de Atención Primaria, ambos objetivos hoy día son una realidad.
Sabana Mula tiene las organizaciones comunitarias  y los liderazgos más fuertes de la provincia, el gran reto para el desarrollo de su potencial sigue siendo el agua; agua para la producción y agua para el consumo humano.
Agua, infraestructura vial, explotación de los atractivos culturales, terminación del hospital  y  financiamiento al sector productivo sigue siendo una deuda del Estado con la comunidad de Bánica.